Sopas de Mamá y Postres de la Abuela ...

Hay que comer, alimentarse de alguna forma, muchos no lo pueden hacer, algunos podemos elegir y siempre pedimos mas, ya no se trata de alimentarse, ni de satisfacer necesidades, ahora se trata del placer en sí que genera tan cotidiana faena, ayer tenia unos antojos impresionantes, mi tacto estaba ansioso de comer, de digerir, de desgarrar, desmenuzar, despedazar, de sentir como una esencia entra a mi cuerpo, mi alma, y se entrega totalmente a ser transformada en mi por mi, valerosa, sin sazón a miedo, conserva su sabor intacto y la consistencia adecuada, nutre mis mas oscuros deseos, sacia mi hambre de ella.

Ahora tengo hambre y quiero comer, se suman las dos para atormentar mi aparente calma, hace mucho nada me nutre, hay malos ingredientes en mis recetas, pero tal vez lo que menos quiera en este momento es algo saludable, creo que priman las ganas de comer, tal vez lengua en salsa, que bueno es morder una lengua en su punto, tal vez con algo de albaca, wow, corazones fritos, crujientes por fuera, crudos por dentro, jugosos, mucha pimienta, lastima que los buenos corazones no sean tan comerciales, tal vez sean escasos, difíciles de cosechar o tal vez simplemente la gente ya no los quiera comer, sea una nueva ola de cocina rápida.

Hum, cócteles de sangre, fresa, jugo de naranja, vodka, algo de azafrán, todo muy bien licuado, hum, espumoso, deli, sangre fresca, “dulce”, “tierna”, con un poco de adrenalina, nada fuera de lo común, y ¿a la hora del postre?, piel, no podria ser nada mas que piel, desnuda, suave, fresca, limpia, gotas de rocío esparcidas con yerbabuena como decoración, fragancias de Margaritas y Violetas, tal vez algo de jazmín y tan solo un poco de Fernandas.

¿ a ti que te gusta comer ?